Hace un tiempo Andreu Buenafuente (un humorista catalán, para los que no lo sepan) hacía un monólogo en el que ridiculizaba a vegetarianos y veganos. Por ejemplo, decía que un vegetariano es aquel que te quiere hacer creer que es feliz sin comer carne, o que un vegano es aquel que sólo como vegetales, aunque un día se encontró a uno intentándose comer una farola. Otro día, un monologuista amateur en un programa del tipo "El club de la comedia" explicaba que él era vegetariano y no podía entender como su novia al ver la película "Babe" se ponía a pensar en el McDonald's, porque sería como si a él una selva amazónica le recordara el Ikea. También explicaba que buscando trabajo encontró un anuncio para cubrir una plaza de asesino vestido de payaso, se presentó y resultó que buscaban un torero.
A dónde quiero llegar? Pues bien, como vegana me hacen bastante más gracia los chistes del segundo monologuista. No vamos a engañar a nadie. Pero es verdad que el humor puede ser ofensivo y por lo que veo la mayoría de las veces lo es. Sí, como vegana podría sentirme ofendida por los chistes de Buenafuente, pero para qué?
A uno le gusta decir, o sentir que dicen por él, y no tanto ser dicho. Los vegetarianos y veganos solemos ser objeto de humor, pero pocas veces sujetos, creadores de ese humor. En fin, pienso que no es que sobren los humoristas que hacen chistes sobre vegetarianos, sino que faltan los humoristas vegetarianos que muestren su versión de lo que es ser vegetariano y nos hagan reir con chistes sobre carnívoros, por ejemplo.
Quien habla de humor habla de tantas otras cosas. Faltan personas que sean sujetos, creadoras de una cultura animalista. Hacen falta humoristas, directores de cine, guionistas, presentadores de televisión y un largo etcétera de personas animalistas que muestren el mundo desde nuestro lado. Porque tener la palabra tiene mucho valor. De eso no hay duda.
A mi modo de ver el animalismo se refleja básicamente en la literatura filosófica y sobre el movimiento de los derechos de los animales. Por supuesto, también hay toda una literatura sobre nutrición y cocina vegetariana y vegana. Esto es así por razones obvias, pero pienso que el crecimiento de una cultura animalista sería de gran ayuda, sobre todo porque ayudaría a la normalización, a hacer visible a todo un colectivo y sus ideas.
Es por eso que me gustan tanto los cuentos infantiles para niños vegetarianos/veganos. También las obras de escritores vegetarianos que reflejan su manera de ver las cosas, como Isaac B. Singer o J. M. Coetzee.
Para muestra un botón: aquí os dejo un enlace a la página de un dibujante de cómics vegano que ironiza en sus viñetas sobre el trato que damos a los demás animales.
También hay artistas veganos que muestran sus inquietudes en sus obras. Buscando por internet se pueden encontrar cosas interesantes.
Seguro que debe haber multitud de ejemplos de la cultura animalista y estoy segura que cada vez irá a más. Y a más veganos más fácil será que crezca esa cultura, que en definitiva es una herramienta para ayudar a los demás animales.
miércoles, 2 de febrero de 2011
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2 comentarios:
Interesante reflexion, aunque no tengo la percepción de que los vegetarianos y veganos seais un colectivo objeto de humor
No es una reflexión original (acaso tengo alguna?). Algo leí sobre este tema hace un tiempo. Tampoco quería decir que los vegetarianos seamos especialmente objeto de humor. De hecho, qué cosa no es o puede ser objeto de humor? Sí es verdad que la imagen que suele darse de nosotros es bastante ridícula (vease el glorioso anuncio de los carniceros Campofrío). Y lo triste es que no es sólo nuestra imagen la dañada, sino la de la causa que representamos. También es verdad que el que se haga chistes sobre veganos es buena señal porque quiere decir que la gente empieza a saber que existimos.
Gracias por tu comentario!
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