martes, 24 de mayo de 2011

Bizcocho vegano estilo tiramisú

Este fin de semana celebrábamos el cumpleaños de mi padre y para la ocasión preparé un bizcocho vegano estilo tiramisú. Es un invento mío, muy fácil y que recuerda al sabor del tiramisú.

Es tan fácil como hacer un bizcocho vegano básico, siguiendo la receta que os guste más. Yo, por ejemplo, adapto la de esta web.

Para el bizcocho:

300 gr. harina de trigo
125-150 gr. harina de maíz (también se podría poner sólo harina de trigo)
1 sobre de levadura
100 gr. de azúcar o fructosa
1 yogur de soja (o 1 ó 2 piezas de fruta, como pera, plátano...)
1 taza de aceite de girasol
2 tazas y 1/2 de licuado de soja (también se puede sustituir por agua)

Mezclamos las harinas y la levadura en un recipiente. En otro recipiente, mezclamos el yogur de soja o las frutas en trocitos, el aceite de girasol, la leche de soja y el azúcar. En este caso, como queremos conseguir un sabor neutro no añadimos nada más (chocolate, canela...)

A continuación, añadimos la mezcla de harinas y levadura y lo mezclamos bien.

Precalentar el horno a unos 220 grados centígrados. Se unta el molde para el bizcocho con un poco de margarina y se esparce un poco de harina, se echa la mezcla y al horno hasta que suba el bizcocho. Horneamos a 180º sólo por la parte de abajo para que el bizcocho suba. Lo sacamos cuando pinchamos un tenedor y sale seco.

Dejarlo enfriar y listo.

Para el tiramisú:

1 vaso café
Nata de soja montada (por ejemplo, de la marca Soyatoo)
Cacao en polvo
Birutas de chocolate (opcional)
Coñac (opcional)

Una vez el bizcocho está frío, lo cortamos por la mitad y bañamos la capa inferior con café al que hemos echado un poco de coñac, al gusto, una vez frío. Nosotros no teníamos, así que pusimos whisky. Otra opción menos alcohólica es dejar diluir una onza de chocolate sin leche en el café cuando todavía está caliente.

Una vez empapada la capa inferior del bizcocho, le ponemos la nata montada. La de la marca Soyatoo ya viene montada y se echa como un spray. Por otra parte, se empapa de café la capa superior del bizcocho y con cuidado se pone sobre la nata. Para terminar, lo cubrimos con cacao en polvo y por encima lo podemos decorar con unas birutas de chocolate. Se guarda en la nevera y se toma frío.

Es importante empaparlo bien en el café porque sino luego no se nota mucho el sabor. A nosotros nos pasó que no lo mojamos lo suficiente.

No es tiramisú pero da el pego y está muy bueno. La nata no es lo mismo que el mascarpone, pero hasta que no haya un mascarpone vegetal a mí no se me ocurre nada mejor.

Gustó mucho a la familia, o al menos nadie se quejó.

sábado, 7 de mayo de 2011

Comiendo vegano en París

La última semana de abril estuvimos en París unos días, así que he pensado en dejar mi experiencia con los restaurantes, aunque no sea mucha, por si le sirve a alguien.

En primer lugar, busqué información en Happy cow y en el foro de la UVE. Como veréis hay muchos restaurantes vegetarianos y también algunos veganos, como era de esperar en una gran ciudad como París.

No es complicado comer en París, además en cualquier restaurante oriental es fácil encontrar opciones veganas, pero si preferís dejar vuestro dinero en restaurantes vegetarianos, como era nuestro caso, encontraréis bastante oferta.

No fuimos a todos los restaurantes que nos hubiera gustado por una cuestión de tiempo, pero también de dinero. París es una ciudad carilla, o al menos más que Barcelona, y eso se nota a la hora de comer. Cualquiera de los restaurantes a los que fuimos eran un poco más caros en comparación con otros similares de Barcelona y eso que buscamos los más económicos.

Loving Hut (boulevard Beaumarchais, 92), no muy lejos de la Plaza de la República, está bien de precio. No hay menú pero los precios de la carta son asequibles. Hay entrantes, platos principales y postres. No puedo compararlo con otros restaurantes de la misma cadena, porque este era el primero al que iba, pero me gustó mucho. De hecho, a mí el hecho de que un restaurante sea vegano ya me tiene ganada ;-)

Ésta es la web: www.paris.lovinghut.fr



En este cartel explica que los veganos somos inteligentes, deportistas y guapos. Vamos, lo que todo el mundo sabe.



Saveurs Végét’Halles (rue des Bourdonnais, 41) está bastante céntrico, en una calle que cruza la rue de Rivoli. Es vegetariano pero la mayoría de los platos son veganos y están marcados. Hay menú y también la opción de hacer entrante y plato o plato y postre. Nosotros fuimos a cenar y un entrante y un plato principal nos salió por casi 16 euros. Al mediodía sale mejor de precio, pero de todas maneras comimos muy bien y para ser París se puede considerar barato.

Aquí hay más información: www.saveursvegethalles.fr



Oh!Bio (rue Rambuteau, 58) es un pequeño restaurante justo al lado del Centro Georges Pompidou. Está en la misma calle que Le Potager du Marais (rue Rambuteau, 22), pero es bastante más barato. Hay platos desde 7 euros, todo muy bueno aunque las raciones son algo escasas. Los platos veganos eran mayoría y también estaban marcados.



En Montmatre fuimos al restaurante Au Grain de Folie (rue la Vieuville, 24), y digo restaurante por llamarlo de alguna manera. De verdad, no sé como explicarlo. Es muy pequeño pero es que a parte la señora que lo regenta lo utiliza de trastero. El día que fuimos éramos tres parejas y un señor y todavía no entiendo como ninguno se fue de allí, supongo que por deferencia. El caso es que no había nada preparado de comida y la señora se tuvo que poner a cocinarlo todo en ese momento. Tuvimos que esperar un buen rato, mientras sentíamos todo el proceso de elaboración. Por ejemplo, olimos como se quemaba la cebolla y efectivamente, después nos trajeron la cebolla quemada. Los platos eran "formules", que dicen los franceses, consistentes en un único plato con un poco de ensalada, un poco de arroz y de legumbres y en medio lo que hubieras elegido (un poco de hummus, seitán...). Todo muy escaso y con bastante poca gracia. Las "formules" eran 13 euros y el menú, que era lo mismo más un apple crumble, eran 18 euros. En mi pueblo esto es un atraco a mano armada. Que queréis que os diga, no es como para recomendarlo. De todas formas, si sois unos frikis amantes de los antros, no os lo perdáis y, por favor, ya que vais no dejeis de visitar la toilette.

Como veréis, por fuera parece normal:



De todo esto no puedo sacar muchas conclusiones, pero si quiero destacar un par de cosas positivas, que bien podrían ir copiando los restaurantes vegetarianos de por aquí. A saber, la costumbre de marcar los platos "végétaliens" (veganos) en la carta y de ofrecer postres veganos decentes.

A todo esto, que bonito es París!

miércoles, 4 de mayo de 2011

Ser humana

Yo soy privilegiada. Se me respeta la vida, se me reconoce el derecho a no ser usada y lo mejor, puedo usar a otros sin que nadie me pida cuentas. Que por qué? Está claro. Porque yo soy humana y ellos solo son animales.

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A parte de esta ida de pelota, y en la linea de lo que explicaba, os dejo este cortometraje titulado La mirada circular. Un viaje a la piel del otro, al menos para los que no han perdido la capacidad de empatía. Genial.